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Una lámpara de escritorio está diseñada para iluminar la zona de trabajo y ayudar a reducir la fatiga ocular y los síntomas que la acompañan. Por no mencionar que una buena lámpara para oficina puede aumentar el estado de ánimo y la producción.
En casa o en el trabajo, los escritorios tienen una función específica como proporcionar una zona para realizar las tareas con comodidad y eficacia. Por tanto, una vez que hayas establecido un espacio para leer, escribir o trabajar con la laptop, es hora de asegurarte de que el escritorio esté bien iluminado.
A continuación, te presentamos algunos consejos para elegir la lámpara de escritorio perfecta para tus necesidades en la oficina de tu hogar.
5 aspectos para elegir una buena lámpara de escritorio
1. Las características
¿Estás buscando una lámpara con el tipo de bombilla adecuado para tus proyectos? Si es así, no olvides tener en cuenta siempre tus necesidades de iluminación antes de realizar cualquier compra. Por ejemplo, muchos modelos de lámparas vienen con reguladores de intensidad y otras funciones de iluminación.
Asegúrate también de saber a qué altura te gustaría que tuviera tu lámpara de escritorio, aunque muchas lámparas vienen con brazos ajustables o flexibles para ajustar la altura a tus necesidades del momento. Luego, está la luminosidad; por eso, asegúrate de encontrar una que te ofrezca la luz adecuada, y de ello depende el tipo de bombilla.
2. El material
¿Sabías que las lámparas para escritorio se fabrican con distintos tipos de materiales? Los más comunes son el molde de plástico, un cuello de metal flexible recubierto de plástico, cerámica, madera, etc.
Sin embargo, la elección del material de la lámpara dependerá únicamente de si resulta práctica para tu oficina y si va acorde con la decoración del lugar.
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3. La funcionalidad
Tanto si optas por la iluminación incandescente tradicional como por la iluminación LED de bajo consumo, cualquier tipo de lámpara debe emitir una luz brillante sin deslumbrar. Por ende, debes asegurarte de que la luz sea clara y cómoda para trabajar, de lo contrario sufrirás fatiga visual.
Otra característica a tener en cuenta es la regulación de la intensidad de la luz. Al realizar ciertas tareas, es posible que necesites más o menos luz que otras. Y gracias a un regulador de intensidad te permitirá aumentar el nivel de luz según lo necesites.
4. La dimensión
¿Qué tamaño tiene tu escritorio o espacio de trabajo? ¿Quieres una lámpara pequeña o grande? Estas son algunas preguntas sencillas que puedes hacerte, ya que un paso fundamental para elegir la lámpara ideal es medir el espacio que tienes en casa.
Por ejemplo, si tu escritorio es relativamente pequeño o lo tienes repleto de objetos, no te convendrá elegir una lámpara grande. Como regla general, asegúrate de que esta sea proporcional a la superficie del escritorio.
5. La colocación
¿Sabías que la posición de la bombilla nunca debe estar en tu línea de visión? Mantén la luz por encima de tu cabeza y dirígela hacia abajo sobre tu espacio de trabajo.
En el escritorio, evita las sombras colocando la lámpara en la esquina opuesta a donde estés trabajando. Por ejemplo, si eres zurdo, coloca la fuente de luz en el lado derecho del escritorio. Y, si eres diestro, tu lámpara debe estar al lado izquierdo del escritorio.
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¿Qué otras características buscar en una lámpara de escritorio?
Existen algunas características que debes tener en cuenta antes de tomar una decisión final sobre una lámpara de escritorio. La más obvia es la iluminación, por lo que muchas de ellas ofrecen diversas opciones de iluminación.
Estas opciones pueden ser para la iluminación de tareas, la iluminación ambiental, o tal vez, la iluminación de acento. Sin embargo, hay algunos tipos de lámparas eléctricas que ofrecen las tres opciones; por tanto, el tipo de iluminación que necesites dependerá únicamente de lo que quieras hacer en tu escritorio.
La decoración es otra característica a considerar. Es cierto que la mayoría de las veces las lámparas de mesa se eligen por sus usos prácticos. Pero, si puedes encontrar una que sea práctica y, además, vaya con el ambiente del escritorio existente, sería muy agradable.
La altura es otra característica clave en la decisión de compra. En ese sentido, hoy en día, muchas lámparas son ajustables para satisfacer las necesidades de cada persona.
Y, por último, pero no menos importante, son los niveles de brillo. Y es que la cantidad de brillo que posee una lámpara de escritorio a menudo tiene que ver con el tipo de bombilla que utiliza. Pero, no te preocupes, ya que ahora hay muchas lámparas que tienen interruptores de control de brillo.
En conclusión, elegir la lámpara de escritorio adecuada no sólo se trata de buscar una que sea estéticamente atractiva, sino que cumpla con los requerimientos de iluminación, consumo de energía y temperatura de color necesarios para el tipo de trabajo que realizarás.
Asimismo, es importante tomar en cuenta estos aspectos para poder evitar el cansancio y fatiga ocular, mejorar la productividad y crear un ambiente de trabajo adecuado. No olvides que con una adecuada elección, mejorarás la experiencia en el lugar de trabajo y tendrás un ambiente óptimo para la realización de las tareas diarias.
Hasta aquí, hemos visto cómo elegir lámparas adecuadas para tu oficina. Esperamos que estos consejos sobre la compra de lámparas de escritorio te ayuden a elegir la adecuada. Y recuerda que son esenciales como elemento decorativo además de aportar una buena iluminación en el hogar.
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