Cómo limpiar un comedor efectivamente

El comedor es el lugar perfecto para compartir con la familia, tanto de día como de tarde y noche. Nos juntamos para comer, charlamos sobre nuestras actividades y pasamos un placentero momento juntos. Pero no basta con comprar un buen comedor y esperar que se mantenga como nuevo todo el tiempo, ¡también debemos saber cómo mantenerlo limpio!

Limpiar un comedor de forma efectiva puede parecer un trabajo costoso, pero si trabajas en ello todos los días con ayuda del resto de la familia, tendrás mejores resultados y más tiempo para disfrutar con los que amas.

Aquí en Colineal hemos recopilado unos consejos que debes tomar en cuenta antes de empezar la limpieza.

Desempolva

Desempolva regularmente. Los ácaros del polvo aman el pelo de mascota o las células de la piel muerta que dejamos atrás pero que a simple vista no vemos, así que quita el polvo de todos los muebles del comedor. Puedes utilizar un paño de microfibra para deshacerte de la suciedad y no solo esparcirla por todos lados.

En el caso de los manteles o sillas acolchonadas, aspirar es suficiente. Sin embargo, a la hora de limpiar los objetos más delicados del comedor, como la vajilla y jarrones, debes usar un paño limpio y tener mucho cuidado. 

Si cuentas con objetos de cristal o adornos de porcelana, lávalos regularmente con agua y detergente (o agua y jabón si se trata de porcelana con adornos), enjuágalos con agua fría y sécalos con un trapo seco y suave.

Lavar de forma constante estos artículos será suficiente para mantenerlos relucientes y libres de bacterias. 

Aspira el lugar

Coloca las sillas sobre la mesa o en el pasillo, así tendrás espacio para limpiar. Aspira el suelo, o la alfombra en caso de que tengas una, pues siempre caerá un poco de comida sobre ellos. Limpia al menos una vez a la semana para evitar la acumulación de moho y mantener el polvo al mínimo. 

No olvides las cortinas o persianas. Puedes desmontarlas y lavarlas a mano, o simplemente ayudarte de la aspiradora o un plumero para limpiar de arriba hacia abajo.

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Limpia las sillas

Desempolva las sillas, y si tienen asiento o respaldo de cuero u otro material especial, asegúrate de revisar la etiqueta para limpiar tus sillas de manera adecuada. 

En el caso de las sillas de madera, te recomendamos el uso de soluciones naturales como el vinagre blanco y agua tibia o una mezcla de aceite de oliva y alcohol.

Sumerges un paño en la mezcla, lo escurres hasta que esté casi seco y limpias la superficie deseada. Esto eliminará cualquier rastro de aceite o grasa que nuestras manos hayan dejado —además, puedes lijarlo y pintarlo para darle un mejor acabado.

También te aconsejamos lavar las fundas de las sillas si son removibles para garantizar una limpieza completa, siempre teniendo en cuenta su material.

Mantener las sillas limpias es esencial si tienes niños en casa, pues en esa etapa son más susceptibles a desarrollar alergias.

Limpia la mesa

En realidad, esto es algo que deberías hacer todos los días después de cada comida. Además, de esta forma ahorrarás trabajo extra al limpiar el comedor en su totalidad. 

Retira todo artículo que encuentres sobre la mesa y rocía un desinfectante doméstico apto para niños y mascotas. Esto ayudará a eliminar los gérmenes y bacterias que se encuentran en los restos de comida que pudieron haber salido del plato, manteniendo segura la salud de tu familia. 

Tras aplicar el desinfectante, solo debes esperar unos segundos y limpiar la superficie con un paño limpio y seco. Deja que la mesa se seque antes de volver a colocar los artículos limpiados previamente encima.

Si tienes un asiento elevado y con bandeja para el más pequeño de la casa, repite el mismo procedimiento al terminar su uso. Sabemos que los niños que están aprendiendo a comer suelen botar la comida por todos lados.

¡Tener un comedor limpio es fácil!

Limpiar tu comedor no tomará mucho de tu tiempo. Puedes empezar haciendo una lista para limpiar de forma más eficiente, así tendrás en mente todo lo que se debe hacer sin pasar nada por alto. 

Siempre ten a la mano los materiales que necesitarás para la limpieza (desinfectantes, paños, detergentes y demás). Con el tiempo, y si te aseguras de incorporar esta práctica en tu vida diaria, será más sencillo tener el comedor que tanto deseas y podrás disfrutar del placer de la sobremesa al lado de tu familia. 

¡Esperamos que estos consejos te hayan servido! Solo falta poner manos a la obra y ¡buen provecho!

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